LOGROS

Inicialmente La Fundación concentró sus esfuerzos en modelos y proyectos dirigidos al sector público, en los Municipios cercanos a Bogotá, con cuyos resultados se espera ampliar la cobertura Nacional hacia los 1.100 Municipios de Colombia (Unidades mínimas de intervención político-administrativa); a nivel social los proyectos tienen proyección hacia los cerca de 40 millones de Colombianos que ocupan el territorio Nacional, por lo que el objeto social de La Fundación es de largo plazo (Mínimo 30 años para consolidar la información básica Colombiana y mínimo otros 50 años para su puesta en marcha en implementación).

 

Si bien se han realizado gestiones para la implementación de nuestros modelos en muchos municipios de Colombia (San José del Guaviare-Guaviare, Valledupar-Cesar, Neiva-Huila, Pitalito-Huila, Florencia-Caquetá, Cúcuta-Norte de Santander, San Gil-Santander, entre otros), solo ha sido posible su aplicación en los Municipios de Cota (Cundinamarca), Gachancipá (Cundinamarca), Tocancipá (Cundinamarca) y Barrancabermeja (Santander), con beneficio tanto para las instituciones y sus funcionarios por la capacitación y aprendizaje, como para las comunidades con quienes se han desarrollado y socializado nuestros proyectos.

 

En Cota por ejemplo, se establecieron contactos con residentes urbanos, campesinos y personas de la comunidad indígena a quienes se presentó la metodología para elaboración del EGAM-Cota, la PNDEA y Plan Verde y manifestaron su interés por vincularse a la implementación de los proyectos de La Fundación; grupos de base con quienes se mantiene contacto y a los que se brinda apoyo técnico de acuerdo con sus necesidades hasta el día de hoy a pesar de que el proyecto con la Administración Municipal finalizó en el año 2007.

 

Para Gachancipá se realizó la “Elaboración de la Unidad de Planificación Rural UPR del Área de Actividad Industrial Oriental del Municipio de Gachancipá y entrega mediante oficio firmado por el Alcalde Municipal a la CAR, incluyendo: Documento de Diagnóstico, Documento de Formulación, Proyecto de Decreto de adopción de la UPR Oriental, Cartografía de Diagnóstico y Formulación dentro de un SIG, Anexo 1 (Informe del levantamiento topográfico y aplicativos SIG), Anexo 2 (Estudio hidráulico), Anexo 3 (Lineamientos para la Revegetalización de la UPR Oriental: Arborización, Jardinería y Paisajismo), Anexo 4 (Tipologías y diseños de base para la restauración ecológica y la revegetalización de la UPR Oriental)” (2009).

 

Y en Tocancipá se suscribió un Convenio con el Municipio para la “Elaboración del Esquema de Gestión Ambiental EGAM, Contextualización dentro del Municipio de la Política Nacional de Educación Ambiental a través de los Proyectos Ambientales Escolares PRAE, Elaboración del Manual Verde de Tocancipá e Implementación del Plan Verde Municipal” (2009-2010).

 

Dentro de nuestra tarea de vincular el sector institucional también se han realizado actividades de apoyo, asesoría y acompañamiento al Ministerio de Cultura para la formulación del componente ambiental de algunos Planes Especiales de Manejo y Protección PEMP de los Bienes de Interés Cultural BIC (Granja San Jorge-Ibagué, Parque Arqueológico Las Piedras del Tunjo-Facatativá, Puente de Boyacá-Boyacá) y se suscribió con el ICANH un convenio para “Aunar esfuerzos Administrativos, Técnicos y Financieros para constituir el Plan Institucional Ambiental del ICANH y los Parques Arqueológicos administrados por el Instituto” (2016), con lo cual no solo ampliamos nuestra intervención institucional sino que logramos hacer reconocimiento territorial y social en zonas bastante aisladas de Colombia (San Agustín-Huila, Alto de los Ídolos-Huila, Tierradentro-Cauca, Teyuna-Magdalena).

También se elaboró para la Fuerza Aérea Colombiana el “Modelo de Gestión Ambiental para los Territorios de las Bases de la FAC en Colombia. Caso GAORI-MARANDÚA”, en el Departamento del Vichada, replicable a las demás bases de la institución en todo el Territorio Nacional.

 

Por otro lado, si bien iniciamos nuestra intervención en los Municipios cerca de la capital Colombiana, se identificaron mediante la aplicación de Sistemas de Información Geográfica SIG, las zonas de baja oferta ambiental que hemos definido como prioritarias en Colombia para la intervención de La Fundación por estar asociadas al mayor deterioro social, las cuales correlacionan con las zonas semidesérticas y secas, ya que el agua es la base de la vida y donde ella es escasa no hay recursos para generar economía y desarrollo; en muchos casos ni para garantizar las condiciones mínimas para la vida humana.

 

Desde el punto de vista ambiental, estas zonas corresponden a los bosques secos tropicales que han sido declarados como Ecosistemas Estratégicos Nacionales por el Ministerio de Ambiente, aunque no hay programas específicos de desarrollo para las comunidades asentadas en estas zonas.

 

Se visitaron las zonas más secas de Colombia: Desierto de la Guajira, desierto de La Tatacoa (Huila), Cañón del Chicamocha (Santander) y La Candelaria (Boyacá). Los cuatro con baja densidad poblacional (la cual aumenta hacia los subxerofíticos vecinos), ocupados por comunidades indígenas los dos primeros y los dos últimos por campesinos. La Candelaria con un proceso intensivo de desarrollo rur-urbano como chaletización por la cercanía a Bogotá y la consolidación turística que está cambiando radicalmente la fisonomía y cultura de la zona.

 

En las zonas subxerofíticas o semidesérticas más secas la pobreza y concentración de la población marginada aumenta de manera exponencial: Sur de Guajira, Sabana costera desde Santa Martha hasta Córdoba, Santanderes, Boyacá, diferentes tramos de los Valles de los Ríos Magdalena, Cauca, Dobio en el Valle del Cauca y Patía en Nariño.

 

En estas zonas, las tierras de propiedad de personas adineradas muestran desarrollo con infraestructura para riego y mecanización para cultivos extensivos de algodón, sorgo, arroz, entre otros, además de la ganadería; donde la falta de capital no permitió la realización de grandes inversiones para habilitar la producción, especialmente en Santander, se han establecido comunidades muy pobres en condiciones absolutas de miseria, donde la incapacidad del territorio para suplir las necesidades mínimas para la subsistencia humana han generado relaciones sociales sólidas y estables, históricamente consolidadas a través de generaciones enteras de aparcería y subaparcería, que resultan en familias sumidas en una cadena eterna de pobreza generacional perpetua.

 

La mejor opción productiva en estas zonas ha sido, desde el descubrimiento de América, el cultivo del tabaco (En la época post-hispánica también el añil y la cochinilla, actualmente sistemas productivos extintos). Dado que las comunidades son muy pobres y no cuentan con garantías para acceder a créditos, las empresas tabacaleras han financiado el cultivo y la infraestructura para el procesamiento de la hoja; prestan el dinero sin interés, con mostrar solo la cédula, dan asistencia técnica gratuita y garantizan al productor la compra de la cosecha, lo cual ha conformado núcleos tabacaleros muy sólidos, especialmente en los Santanderes.

 

Dado que el tabaco representa un riesgo para la salud humana y hay una movilización mundial contra su consumo, nuestra intención inicial fue la de promover el cambio hacia sistemas productivos alternativos, en el marco de nuestro proyecto PRODSECO. Se visitaron varias sedes de Corpoica del país buscando programas de investigación que apuntaran a promover la sustitución del tabaco y no se encontró absolutamente nada; pero el Ministerio de Agricultura tiene cadena productiva, el SENA programas de formación, CORPOICA líneas de investigación y FINAGRO línea de crédito para las Empresas tabacaleras como Operadores, lo cual es realmente contradictorio.

 

Al conversar con campesinos de todas las zonas tabacaleras, la respuesta a la necesidad del cambio fue definitiva: si no existiera el tabaco y la financiación por parte de las tabacaleras, las miles de familias ubicadas en estas zonas engrosarían las filas de la guerrilla, el paramilitarismo, el narcotráfico y la delincuencia común, dado que la prioridad es la supervivencia y el sostenimiento familiar, no se conocen alternativas de producción y en las entidades gubernamentales no hay respuesta a estas necesidades.

 

El descuido del Estado en estas zonas no es solo en lo productivo; el atraso en el desarrollo rural es generalizado; no hay vivienda digna, ni agua potable, ni saneamiento básico, son deficientes otros servicios públicos (Gas, TICs, Energía) y los servicios sociales (Educación, salud, recreación, cultura, etc.), no hay seguridad alimentaria, equipamientos, infraestructura vial, ni incentivos a la conservación de los recursos naturales de por sí ya sobre explotados, a pesar de que el Estado considera los ecosistemas de estas zonas como estratégicos y su biodiversidad en riesgo de extinción.

 

Dado que el tabaco es la mejor opción para las comunidades, que no hay actualmente alternativas de sustitución y que el paquete tecnológico que se aplica es costoso para los productores y de alto impacto ambiental, se consideró necesario buscar alianzas con el sector empresarial tabacalero para promover la acción social empresarial con visión ambiental, mientras de manera simultánea se buscan alternativas productivas para la sustitución y eliminación del cultivo y la manera de implementarlas sin causar un trauma social.

 

Por lo anterior, se clasificaron los PRODSECO como proyectos de producción convencional y proyectos de producción alternativa. Para los primeros se diseñó una aplicación del Esquema de Gestión Ambiental EGA para las zonas tabacaleras tratando de incluir la visión integral de territorio y el desarrollo rural con participación de la empresa privada y las comunidades. De los segundos tenemos un listado de más de 300 especies de la biodiversidad con potencial económico como banco de oportunidades para el desarrollo sostenible de los territorios en donde adelantamos nuestro objeto social.

 

Tras haber visitado muchas empresas, tabacaleras o no, en busca de donaciones para la financiación de los proyectos (Compañía Colombiana de tabaco, Clariant, entre otras), se suscribió un convenio en el año 2005 con una empresa denominada SINTEC, que hizo un aporte económico a manera de donación a La Fundación para financiar el inicio del proyecto “Esquema de Gestión Ambiental para la erradicación de la pobreza y el desarrollo Armónico, Sostenible, y Sustentable de las Comunidades y Áreas productoras de Tabaco”.

 

Para este proyecto, se obtuvo la vinculación y participación de Protabaco SA en el año 2011 mediante la suscripción de un convenio cuyo objeto fue la “Adecuación del Sistema Productivo del Tabaco para  contribuir a la Erradicación de la Pobreza y la Sostenibilidad Ambiental de las Comunidades Tabacaleras Colombianas”,  mediante el cual se fortalecieron las relaciones que La Fundación venía promoviendo a nivel social y comunitario con las comunidades de las zonas tabacaleras, en su mayoría desplazados, en algunas de las zonas cálidas y secas de Colombia (Altamira-Huila, San Gil y Los Santos-Santander, Matitas-Guajira, entre otros), con las cuales se mantiene contacto y se brinda apoyo técnico de acuerdo con sus necesidades hasta el día de hoy a pesar de que el proyecto con SINTEC finalizó en el año 2009 y con Protabaco en el año 2012.

 

La vinculación del sector privado también ha incluído asesoría gratuita en diferentes temáticas ambientales a Empresas como Irridelco (2005 a 2017) y Ecointegral Ltda. (2007 a 2009), entre otras, así como contratos con empresas en desarrollo de iniciativas ambientales en casos como: Constructora parque Central para el “Diseño, construcción, ejecución y mantenimiento de obras de paisajismo y arborización en el centro de distribución Colombina Distrito Bogotá, segunda etapa, ubicado en Cota – Cundinamarca” (2007), PVC-GERFOR para el “Diseño, construcción y ejecución de obras de paisajismo y arborización de zonas verdes en la planta de PVC GERFOR S.A. ubicada en Cota – Cundinamarca” (2007 a 2012), ICOLTRANS para el “Diseño, construcción y ejecución de obras de paisajismo y arborización de zonas verdes en el centro de distribución ICOLTRANS LTDA ubicado en Cota – Cundinamarca”(2008 a 2010), SUPERPOLO para el “Diseño, construcción y ejecución de obras de paisajismo, arborización y jardinería de zonas verdes en la planta de SUPERPOLO S.A. ubicada en Cota – Cundinamarca” (2008) y EMGESA para “Cofinanciar y ejecutar el Programa de Revegetalización del Humedal Taboima con Participación de Grupos Comunitarios del Municipio de Tocancipá” (2015 a 2016).

 

También hemos hecho acuerdos con entidades pares de la Sociedad Civil Organizada bien como apoyo mutuo o bien para la ejecución de actividades específicas dentro del marco de nuestro objeto social, nuestros modelos y nuestros proyectos. Apoyamos a la Corporación CAORDICA en la “Evaluación del estado de dos especies vegetales (Ceibas y samanes) priorizadas mediante la aplicación de un SIG en el Municipio de Santiago de Cali” (2005) y para la “Selección de 3 especies como alternativa a los procesos de producción convencionales en los Municipios de La Cumbre, Vijes, San Pedro del Valle del Cauca” (2006).

 

Realizamos contratos con la Fundación APIC para la “Elaboración del Diseño de la Estructura Curricular, Plan de Estudios y los Contenidos Temáticos del programa de Formación Técnica General o Transversal para un mínimo de 600 horas lectivas, así como la elaboración de las Guías e Instructivos para docentes y estudiantes, todo lo cual hará parte del Área Técnica que contempla el Modelo Académico de APIC como parte delos programas de Formación para el Trabajo y el Desarrollo Humano del Centro APIC de Montelíbano, Departamento de Córdoba – Colombia” (2010) y apoyamos la elaboración de los contenidos curriculares (Caucho, ovinos, piscicultura, oleaginosas promisorias, entre otros) para los procesos educativos que adelanta APIC con comunidades vulnerables (Desplazados y reinsertados de las AUC) en el Alto San Jorge (Puerto Libertador, La Apartada, San José de Uré y Montelíbano - Córdoba).

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La Fundación Línea Verde ha venido cumpliendo sus metas y tareas desde el punto de vista técnico y social; tenemos un gran avance pero la tarea es muy grande por lo que podemos decir que tras 14 años de actividades hasta ahora estamos empezando pero nuestros modelos y nuestras propuestas han sido un éxito absoluto, por lo que cada vez nos acercamos con más confianza a los diferentes estamentos de la sociedad para la construcción de una sociedad más sostenible.

 

Para abordar el componente político se hicieron acercamientos a las organizaciones políticas tradicionales y a algunas alternativas pero el resultado ha sido infructuoso en la medida en que los intereses generalizados son de tipo electoral y no planteamientos técnicos, por lo que tenemos el convencimiento de que en la medida que La Fundación tenga mayor reconocimiento social se logrará permear las instancias políticas por la presión de los grupos sociales con quienes adelantamos nuestros proyectos